En diálogo con Canal E, el analista político Carlos Fara señaló que el gobierno de Argentina “está utilizando un mecanismo poco transparente para aprobar acuerdos, especialmente con el Fondo Monetario Internacional (FMI)”.
En relación con un decreto reciente publicado en el boletín oficial, Fara explicó que, aunque el Congreso debe revisarlo en 20 días, el Ejecutivo buscará limitar la información para evitar conflictos. «Es un típico bypass al Congreso«, comentó, sugiriendo que es poco probable que se logren cambios significativos en la legislación a través de este proceso. La estrategia parece orientada a asegurar el avance del acuerdo sin mayores obstáculos políticos.
El FMI y la falta de apoyo directo a situaciones sociales
En cuanto a las expectativas sobre el uso de fondos del FMI para aliviar crisis sociales, Fara aclaró que, “el FMI no está diseñado para financiar emergencias sociales o de infraestructura, sino que está pensado para normalizar situaciones macroeconómicas«, señaló. A pesar de ello, considera que el gobierno podría redirigir fondos a situaciones específicas si así lo considera necesario, aunque el fondo será estricto en el uso de los recursos.
Sobre la situación en Bahía Blanca, donde la situación social es preocupante debido a las inundaciones, también fue discutido. Fara mencionó que la respuesta del gobierno es incierta, pero que la situación en esa ciudad es lo suficientemente grave como para que ambas partes, nación y provincia, se involucren. Sin embargo, también señaló que, al principio, la discusión política sobre la responsabilidad de la crisis en Bahía Blanca se desinfló rápidamente. «Las dos grandes partes rápidamente concluyeron que la situación era suficientemente grave como para no entrar en conflictos«, subrayó.
El costo político en la gestión de la crisis
Fara también reflexionó sobre el costo político de la situación y cómo todos los actores involucrados están siendo responsables de manera compartida. «Cuando pasan este tipo de situaciones, no hay manera de obtener algún rédito político si la discusión no está centrada en la solución concreta«, afirmó.
A pesar de las tensiones políticas entre el gobierno, el gobernador Kicillof y la vicepresidenta Cristina Fernández, el analista consideró que la sociedad espera una respuesta solidaria más que una confrontación política. «La respuesta de la sociedad ha sido muy clara respecto del tema de la solidaridad», destacó.
La polarización política: ¿Cristina o Kicillof?
Por último, Fara abordó la creciente polarización dentro de la política argentina. En relación con la figura de Cristina Fernández y la relación con el presidente Javier Milei, el entrevistado sostuvo que el gobierno está tratando de diluir la figura de Cristina como la principal opositora al crear una confrontación interna entre Cristina y Kicillof. «Lo que el gobierno está haciendo es distribuir el juego«, explicó.
Para finalizar, el entrevistado agregó: “La confrontación interna podría ser una estrategia para debilitar a Cristina en el Senado, donde aún tiene gran poder político”.